Viene de La innovación en componentes pasivos impulsa los avances tecnológicos
Como los dispositivos conectados inalámbricos y sus aplicaciones proliferan, crece la demanda de cargadores más rápidos, compactos y convenientes. Muchos fabricantes han introducido nuevas gamas de módulos y bobinas de carga inalámbrica. Por ejemplo, TDK-EPC ha aprovechado su experiencia en materiales magnéticos y tecnología de proceso, especialmente con un tipo de hoja metálica magnética, flexible y delgada, para implementar una nueva familia de productos basados en el estándar de alimentación inductiva Qi del Wireless Power Consortium (WPC).
Y, de esta forma, ya se encuentra disponible un cargador de 5 W y bajo consumo diseñado para uso en productos sanitarios y médicos.
Los dispositivos de menor potencia (por debajo de 1 W) se dirigirán a aplicaciones móviles y wearables, mientras que los productos de más de 15 W también están en el horizonte próximo.
La gama TDK Qi se compone de bobinas de transmisión (Tx) y recepción (Rx), incluyendo módulos combo Rx que incorporan una antena NFC (Near Field Communication).
Mientras tanto, Vishay ha lanzado una nueva bobina de recepción de carga inalámbrica, compatible con WPC y basada en polvo de acero, para aplicaciones de 10 W (2 A a 5 V) que alcanza una eficiencia por encima del 70 por ciento.
Como una alternativa a los dispositivos basados en ferrita, que se pueden saturar ante la presencia de un campo magnético fuerte, la bobina de recepción IWAS-4832FE-50 de Vishay se caracteriza por una saturación magnética de menos del 50 por ciento a 4000 gauss, inductancia de 15 µH a 200 kHz y resistencia DC de 255 mΩ a +25 °C. Además, está construida con apantallamiento de alta permeabilidad. Su polvo de acero de elevada saturación no se ve afectado por imanes permanentes, mientras que la bobina bloquea el flujo de carga ante componentes sensibles y baterías.
